Se han demostrado infinidad de cualidades del azafrán para la salud del ser humano. Entre ellas se puede destacar su carácter tónico (estimulante del apetito), digestivo y sedante (combate la tos y la bronquitis, mitiga los cólicos y el insomnio, calma los problemas de dentición infantil). Asimismo, si se ingiere favorece la expulsión de gases acumulados y también es eficaz para combatir los trastornos nerviosos, espasmódicos y el asma. Fortifica el corazón, elimina las obstrucciones del hígado. Asimismo resulta ser una buena alternativa para hacer los platos más sabrosos sin utilizar la sal.
Es carminativo y también emenagogo -regula la menstruación.
Regula los jugos gástricos, activa las secreciones y la movilidad. Se usa como infusión para combatir la depresión. Se utiliza también como; afrodisíaco, para los dolores menstruales y neurológicos, menopausia y diarrea crónica.
Recientemente se ha descubierto que este producto es protector cardiovascular y fuente potencial de agentes anticancerígenos, además se ha descrito que favorece la asimilación de los lípidos. El azafrán incrementa la difusión de oxígeno en el plasma sanguíneo, demostrando tener efecto contra la arteriosclerosis y ser reductor de los niveles de colesterol en sangre. Además es protector hepático y tiene capacidad antioxidante.
El azafrán alivia la fatiga fortaleciendo el corazón y el sistema nervioso.
Si se consume en forma de polvo, aconsejamos asegurarse su origen, ya que actualmente se han encontrado casos donde se vende cúrcuma (color amarillo) con colorantes rojizos para asimilarlo a un azafrán. Se ofrece el pistilo recolectado a mano.
